5 de febrero de 2007

Ne me quitte pas

Convulso se incorporó en la cama. Radio reloj 3a.m. La transpiración corriendo maratones en su frente, resabios de algo anterior, un tiempo ajeno a si mismo, a la realidad concebida más allá de sus pupilas. Espasmo, punzadas profundas en el centro de si mismo, su esencia o su estómago, para luego rendirse a la oscuridad de los párpados hasta que…. y nuevamente. Acechante, acechado él, agazapado tras los muslos de una fémina de mármol. A la espera de ejército armados de animales totémicos, criaturas sacras que viene a devorarlo. Se acercan, la distancia dilata y contrae sus poros, se acercan… La fatalidad, lo inevitable, la asunción de si hasta que las sábanas estén por engullirlo y se despierte. Palpitación 4a.m. Un orden lineal, inevitable, puntual y casi necesario. Ojos cerrados y luego el ventanal, un disco y el sedante crepitar de una púa sobre el vinilo, Nuevamente dentro, la imposibilidad de escapar y la certeza de su fin súbito a las 6a.m. Dos horas más, agazapado en una posición acalambrada con los pies entumecidos, solo dos horas más. Se acercan, se acercan nuevamente y confirman sus sospechas, el ventanal erigiéndose como salida, si arrojarse por el fuera la puerta a las seis de la mañana, al consuelo de estar despertando. Si fuera el ventanal, la voz antigua y mitológica, música, púa y crepitar acabarían. Y saz! el cuerpo arrojado desplegándose veinte pisos abajo, triste y fugaz marioneta. El asfalto de las seis de la mañana, final súbito y sirenas acercándose antes que salgan los vecinos.

2 comentarios:

  1. Ne me quitte pas. Creo recordar que una vez le hice critica a tu escrito.
    Ayer llovio. Hoy lei Harry Potter y la Orden del Fenix (me contagie la fiebre de las mayusculas).
    Y me molesta sobremanera esto de tener que poner mi mail y mi contraseña cada vez que quiero comentar algo. Pero, asi y todo, asumo las responsabilidades y no caigo en el anonimato que nos da a todos un poquito de asco.

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  2. Carnivoria

    Sobrevuelan sobre una imaginacion siempre eficaz. Apuntan a desgarrar la imagen para convertirla en algo falso. Miles de plumas que cubren la mentira y hacen mimetizar su presencia con aires de amistad. Aparecen, no se van, hay carne fresca, de rapiñas cualidades pisan el suelo abierto para condecorarse especiales, excelente carta de presentación, una nueva oferta para no despreciar, mas si el reloj falla, hay que ser concientes que eso sucede. Es dificil convivir con ellos, sobretodo si elaboran un buen cuento, una estrategia sin explosiones, atacando en silencio, vigilando, sin hacer mucho ruido, despacio, de apoco se sumergen, asoman su cabeza, vuelan, reaparecen, vienen en picada, de muy alto, aplastan el suelo abierto, ilusorios, reales, posiblemente hasta alquimistas. Antes la carne parecia fresca, pero con solo tocarla la degeneran, la carne se pudre, huele mal, es imposible combatirlos, no hay nada que hacer contra su existencia y eleccion de vida, que es valida, y según la consideración ajena viven. Son una melodia repetida, ya daba vueltas en mi memoria, y la se tararear. La musica con estas caracteristicas aburre, sobretodo si es de nueva procedencia, porque a pesar de que se conoce el aspecto, el origen se ignora. La melodia aparece cuando la imaginacion vuela, en el mismo aire que la obra. Alas de tiempo, pico de notas, garras melodiosas, brillantemente armonizadas para la ocasion. Ahogada de falencias la musica resulta totalmente un mamarracho, el ejecutante y su instrumento lo revelan. Esa melodia habla por si sola, hay que prestarle atencion, es torpe, pero el ejecutante se pierde en concentracion, se va para otro lugar, lejos, no sabemos porque, pasa seguido esto tambien. ¡Entonces ahi aprovechan para bajar! ¡era el momento oportuno!. Tramperas de virtuosismo, tramperas de destreza, tramperas de una adecuada afinacion. Mientras tanto sobrevuelan la zona como al higado eterno de Hercules.

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