1 de febrero de 2007

Adiós gotas, adiós


Como si rompieras uno que otro esquema y no estallaran los cristales en el suelo. Una ceremonia silenciosa, de la que nadie jamás tendrá noticias. Una duda existencial tan irrelevante que nada suma y ya nada resta.
Una pena, tal vez, una desgracia, una novela, una historia trillada, un radio sin sintonizar, y el ruido ensordecedor que deja a todos en silencio.
De otras mutaciones nacerás, de otras. De otras historia y otras profecías, de otras tardes de lectura y espera. De otra Penélope, de otra mortaja. Carece de importancia de todas formas.
Una silueta dibujada en la puerta, sin palabras, ya no sirven las palabras. La distancia enceguece, hiere con sus tibias ramas, y nace y renace en un árbol interminable, en un círculo, una serpiente de oro, un fuego frío y violeta. La distancia, siempre la maldita distancia.
Como si la ciudad fuera un océano, como si escribieras en función de otras cosas, otras casas, otras personas, otras historias, que son siempre iguales repetitivas y exasperantes.
No, tal vez, tal vez no hay abismo ya, tal vez lo siga esperando, tal vez le tema más a su ausencia, tal vez me pase la vida buscando entrar a la popa del barco.
¿Para qué entrar a la popa del barco? Llenando formularios grises que es el color más triste de todos. Salir de, para llegar a. Y tal vez esta vez ya no quiera llegar. Tal vez esta vez la popa es banalidad, tal vez esta vez la popa ya me suena conocida.
Esta, esta ha de ser distinta, esta vez yo he de estar muerta de miedo y de frío y de satisfacción y de lejanía, y de océano. Esta vez, yo estaré en el colchón, pispeando por la ventana, con un libro en las manos, pero jamás leyéndolo, porque te estaré leyendo a vos, descifrando a vos aunque me resultes indescifrable. Aunque nunca deje de presentarte formularios muerta de miedo, pasando exámenes. Aunque mi histeria me pueble y se complemente con la tuya, aunque nunca leas esto, aunque nunca me atreva. Aunque quiera, Jamaica, aunque quiera extirparte como un tumor, aunque quiera no envidiarte y mirar a tu balcón, aunque quiera irme Jamaica, ya entré a la popa está vez, o es que vos te abriste paso. Abriste la puerta Jamaica, y es tu responsabilidad andar abriendo puertas, es tu responsabilidad encontrarme enroscada en mis palabras, palabras torpes, palabras tristes, palabras largas de lugares comunes, palabras exasperantes e inagotables, palabras que nacen desde vos hacia vos, y pasan por mí como un disparo, brutal disparo que desarma mis estructuras. Aunque quieras salir de mi, Jamaica, aunque que te duela, aunque no lo creas, aunque no me creas Jamaica, la popa es triste y fría Jamaica, la popa está asustada Jamaica, la popa le teme a tu temor Jamaica, la popa, la popa y yo te miramos Jamaica, la popa y yo te estrechamos contra el cuerpo Jamaica, te estrechamos y no te perdonamos que abras las puertas, esta vez no Jamaica, esta vez Jamaica….esta vez…

2 comentarios:

  1. Hacer algun tipo de comentario referente a lo que escribiste me parecio imprudente e innecesario, no valia la pena. Me gusto y punto (.). Espero que el limon se resuelva en otra cosa eh. (limon?)

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  2. De otras mutaciones naceras, de otras.

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